La comunidad de Monte Schoenstatt tuvo una celebración muy especial este 18 de octubre,, marcada por el anhelo de contar pronto con un Santuario de la Mater en ese lugar.

 

 

La familia de Monte Schoenstatt de Lo Barnechea se reunió para conmemorar el día de Alianza en la capilla de los Colegios Monte Tabor y Nazaret.

Al llegar al Colegio, la Divina Providencia nos tenía un delicado regalo! Para nuestra sorpresa y alegría en la entrada del Colegio nos esperaba  un pendón que imitaba el frontis de un Santuario  que nos dio a todos la sensación de haber entrado a la capillita, más bien al anhelado “Santuario de Monte Schoenstatt”. Junto a la entrada esperaba una imagen del Padre José Kentenich junto a dos niños de los colegios, quien recibió a toda la familia con una sonrisa amable y acogedora.

En forma muy especial esta vez queríamos comenzar celebración teniendo un  momento de Adoración al Santísimo, llegaron las Hermanas y ellas dispusieron todo, fue un momento de mucho silencio y profundidad.

El padre Mario Romero dio comienzo a la misa de Alianza, dando mucho énfasis a la apertura del año del Santuario y nos invitó a dar fuerzas a esta “FAMILIA” que está formándose en torno a este nuevo Santuario de Monte Schoenstatt. Nos motivó a  cultivar un espíritu de familia: acogedora, personalizada, unida y alegre; a trabajar todos juntos para la Mater, como familia de María, somos de ella, es el centro de nuestra vida; unidos al Santuario Original, a Bellavista y a todos los Santuarios filiales. Ser familia con conciencia de misión, tener presente el cultivo de la oración, ser testimonio y ser audaces en la acción desde nuestro Santuario hacia la Iglesia y el mundo, caminando juntos hacia el 2014.

Al final de la misa caminamos simbólicamente fuera de la capilla, cerca de donde está la Virgen, ahí nos esperaba la imagen de la Mater de Monte Schoenstatt donde se leyó el rito de Alianza, se cantó el himno de la familia y entregó el capital de gracias que todos traían para regalarle a la Mater.

Hubo mucha gente, la Capilla estaba rebalsada, hubo que poner sillas afuera y conseguir micrófono para que pudieran escuchar los que estaban en el pasillo. La gente se fue feliz de sentir un ambiente de familia alegre, que sueña unida y que tiene una misión común.

Le damos las gracias al padre Mario por acompañarnos en este día tan importante para todos nosotros la familia de Monte Schoenstatt y a las señoras de Federación, y al coro de jóvenes que junto a la Mater nos regalaron una misa de 18 de octubre preciosa, organizada y profunda.

Nuestras próximas misas, si Dios quiere, serán en el terreno: 18 de noviembre y 18 de diciembre.